ALIVIO DE AMOR

Del tercer ojo no veo casi nada
perdí agallas en una escaramuza
y cuando comenzaron a sentarme las alas
subasté mis dotes angélicos
Cambié siete veces mi piel de serpiente
y tantas otras
encontré la incomprensión y el desamor
a mis pies hallaron treinta monedas
que negaron
toda complicidad con el calvario
Ninguna pasión
he abandonado del todo
ningún juego
a ningún placer he renunciado
llevo conmigo
todas las estrellas
que me encendieron
y las sombras
que me querían cautivo de la luz
Doy tributo
a quienes se atreven al absurdo
pido clemencia
por el tiempo
que transcurrí sin rastro
enajenado en el rencor
Y
ahora
voy por lo que queda
a pesar de todo
y de mi




Pablo Martini (juliodosmilocho)

Imagen: Amor (Isadora Marques)